¿Soy yo la mala por no invitar al jefe de mi papá a mi boda íntima?
He estado planeando mi boda durante un año y medio. Soy autista, al igual que mi prometido. Así que hemos llevado un proceso lento que llamamos “planificación de boda sin estrés”, lo cual ha sido mi prioridad más grande. Hemos sido muy cuidadosos con los proveedores, la lista de invitados y todos los detalles. Me mudé a otro estado después de la universidad porque necesitaba empezar de nuevo, lejos de un lugar donde nunca me sentí segura para mostrarme tal cual soy. Desde que me mudé he estado viviendo mi mejor vida, sin tener que enmascararme, aprendiendo a aceptarme con mis discapacidades.
Tengo apagones verbales y apagones físicos completos ocasionalmente, y necesito tener siempre una persona de apoyo conmigo. Esto es importante para la lista de invitados. Además, será una boda tipo brunch dominical – té victoriano – fiesta en jardín. También será una boda sin alcohol.
Falta menos de un año, y acabamos de enviar las tarjetas de “reserva la fecha”. Mis padres llevaban tiempo pidiéndome la lista de invitados, la cual compartimos después de enviar las tarjetas (dejando claro que no se harían cambios). Mi papá me mandó un mensaje diciendo que tenía una sola petición: que su jefe fuera añadido a la lista de invitados. Añadió: “Ya que él es quien está pagando la boda.” Lo cual fue una sorpresa para mí.
Mi boda está siendo pagada de manera bastante equitativa entre mis padres, los padres de mi prometido y nosotros mismos. Mis padres se comprometieron a aportar varios miles de dólares, y yo pensaba que venían de sus ahorros. Ahora resulta que el jefe de mi papá —a quien conocí una vez en la secundaria— es quien puso el dinero. Aparentemente, mi papá le dijo que estaría invitado sin consultarme.
Me mantuve firme y le dije que no. No conozco a esa persona, y estoy planeando mi boda de una manera que me permita ser yo misma. No quiero tener razones adicionales para terminar en un episodio o que todo se cancele porque mi cuerpo no responde o no puedo hablar. Mi papá me respondió diciendo: “Sé que es tu boda, pero también es la boda de MI hija.”
Le envié un mensaje de voz explicando cómo podría afectarme invitar a un desconocido y que esta será la primera vez que mi familia me verá sin ningún tipo de máscara. Intenté explicarle que no habría aceptado el dinero si me hubieran dicho de dónde venía y que tenía condiciones.
Desde entonces no he sabido nada de él. Mi hermano me llamó y me dijo: “Es una petición pequeña que no vale la pena perder a tu familia por eso,” lo cual me hizo caer en un episodio muy malo. Estoy cansada y esto me está drenando. Si de verdad es una “petición pequeña”, ¿por qué es tan importante como para insistir tanto en que venga a una boda íntima?
Si no recibo respuesta, o si siguen insistiendo, les voy a devolver el dinero y me desentenderé del tema.
¿Soy una mala persona por no querer a un desconocido en mi boda? ¿Por qué siquiera quiere estar ahí?